Porque lo de siempre no puede seguir siendo lo de siempre.

Desde CSL no miramos hacia otro lado. Cuando los compañeros nos trasladan un problema, lo asumimos como propio. Y esta vez tocaba alzar la voz por algo que se ha hecho “toda la vida”, pero que ni es seguro, ni es legal, ni debe continuar: la manipulación y retirada de botellas de gases por parte de agentes de la Policía Local.

Hablamos de botellas de butano, propano, oxígeno, dióxido de carbono… materiales altamente peligrosos que no deberían, bajo ningún concepto, ser tratados ni recogidos por personal no cualificado. Y es ahí donde está el error: lo que se ha normalizado durante años es una actividad de riesgo encubierta por la rutina. Y eso, compañeros, no puede seguir ocurriendo.

CSL actúa, mientras otros miran.

Desde nuestro sindicato no nos limitamos a opinar en pasillos ni a soltar comentarios al viento. Actuamos. Elaboramos un informe completo, con base normativa y técnica, que fue registrado formalmente. En él detallamos, con claridad y argumentos, los riesgos asociados a la manipulación y transporte de estos gases, y las leyes que estaban siendo ignoradas.

Nos amparaba la normativa ADR (sobre el transporte de mercancías peligrosas), la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, y Reglamentos de Seguridad referentes a Gases Combustibles y, por supuesto, el sentido común. Porque es evidente: esas tareas no pueden ni deben ser asumidas por la Policía Local.

Fruto de ese trabajo e incluso conversaciones con el departamento de Prevención— hemos conseguido que se emita una orden verbal clara: la Policía Local deja de recoger este tipo de residuos. Será la empresa Serluz quien lo asuma.

Estamos a la espera del informe definitivo, pero la línea está trazada: los compañeros no deben tocar una botella más. Es una cuestión de seguridad, de responsabilidad, y de respeto a nuestro trabajo y nuestras vidas.

Conclusión: la historia cambia cuando uno se levanta.

Lo fácil era seguir como siempre. Lo cómodo era callar. Pero en CSL no vinimos a hacer lo cómodo, sino lo justo. Y este es otro ejemplo de que cuando se trabaja con argumentos, con constancia y con firmeza, las cosas cambian.

Resultado: otro logro sindical. Otro logro de CSL.